Escrito por Alfred Kaufmann.
NO HABÍA LUZ Ni teléfono. Es domingo y sin carro. Todo se apagó ayer sábado a las 2 am. A las 8 am aun no había vuelto y sin café en la mañana me convierto en zombie.
10 am. No hay luz ni teléfono. No puedo llamar a nadie. Salgo de la casa y algunos vecinos del condominio conversan - no hay luz ni teléfono - grita uno que me ve salir. Levanto las manos en resignación y me vuelvo a meter en la casa.
12 mediodía. Ya tomé café, era la primera vez que tenía un intercambio con el vecino de tres casas abajo que tiene una cocina de gas.
2 pm. Abrimos unos atunes y aguacates, descongelamos las pitas, partimos tomates, chiles morrones, aceitunas y comimos sanduiches. Después del almuerzo me fui a hacer una siesta larga y me levanté a las 4pm.
No hay ni luz ni teléfono. Se me fue la batería del teléfono. A mis hijos se les fue desde la mañana intentando conectarse. Mi esposa nunca carga el teléfono en la noche. Sin teléfono y sin baterías y sin luz y sin poder salir. Un vecino que pasaba en carro entró con cara de molesto y paró al verme salir ¿qué está pasando? Pregunté - dicen que es una avería mayor.
7 de la noche. Con velas (se las pedí al vecino del café) Empezamos a jugar cartas, mi hijo, mi hija, mi esposa y yo pero nos interrumpió el murmullo que venía de afuera, en la calle del condominio.
Había un grupo de vecinos reuniéndose “yo fui hasta Cartago a visitar a mi máma y nadie tenía ni luz ni teléfono”. Esto es grande. Había gente que venía de Turrialba y tampoco tenían. Aquí pasa algo. Qué? Pregunté. “Vieron los miles de pájaros que murieron en la amazonía?” Algo está pasando.
De qué hablan?- perdí un poco la paciencia - nos invaden los marcianos – me burlé. Fue una falla y ya. Espero que lo arreglen en la noche. Hasta mañana. Me di media vuelta y me fui. Mi esposa me susurró en el oido: “te lo dije”.
10 pm. Nos quedamos tirados todos en mi cama hasta las 11. Los 4. Fue divertidísimo.
A las 2 am me desperté y abrí los ojos de golpe. No había vuelto. Me empezó una sensación, un temor irracional. Yo ya había sentido esto antes en mi vida.
A las 3 AM no había vuelto y esa sensación de temor empezaba a galopar. La sensación permanente de temor, drena la energía y cansa el cuerpo.
A las 4 am me recordé de dónde era esa sensación. Así me sentí durante la pandemia hasta que desarrollaron la vacuna.
Ahora, 5 años después de la pandemia, de lo que pasó, de Trump, de la vacuna de Pfizer y de la recuperación económica, volví a recordar con el apagón la sensación de pandemia.
Recuerdo que lo ultimo que oí mientras caía en el sueño, fue el sonido de todos los aparatos que se activan cuando vuelve la electricidad.
Comments